Tuesday, January 30, 2018

Entrevista para VOCES, PALABRAS Y RAZONES Por: Julio Cesar Gaviria Muñoz

Entrevista para VOCES, PALABRAS Y RAZONES que es el nombre dado al Nodo de Literatura de la Red Cultural, un grupo por ahora conformado por escritores que crecen y se forman como tales en la Comuna Cuatro de la ciudad de Medellín



A propósito de creación literaria, en esta entrevista nos remitimos al tema en varias de las preguntas, y creo que se complementa con los  decálogos en los que toco el tema de la creación literaria.


Abril 17/2017


Por: Julio Cesar Gaviria Muñoz 


--- ¿Qué es la literatura para usted?
RESPUESTA: Una forma de expresión muy elaborada del espíritu, en armonía con la inteligencia y los sentidos. Es una manera de trascender lo primario, pues va más allá de lo esencialmente físico. Cuando el ser humano se sacude de lo puramente material, aparece la creación, en forma de lo estético. Es este el espacio de la música, la literatura, la pintura, la filosofía. La literatura toma elementos del mundo a través de los sentidos, los decanta a través de la inteligencia y lo emocional y lo expresa a través de la conjugación y combinación de las palabras, en este caso escritas, aunque lo oral, más allá de lo meramente utilitario, también tiene cabida.

--- ¿ Considera que la literatura es un Arte?
RESPUESTA: Claro que es un arte, en la medida que es una actividad en la que el hombre recrea, con una finalidad estética, un aspecto de la realidad o un sentimiento en formas bellas e imaginativas valiéndose de la materia, la imagen o el sonido, en este caso las palabras como herramientas de creación. El escritor es un artista, ya que hace una transformación de la realidad cruda con fines estéticos, para transformar su apreciación de ella, o proponer nuevos valores, ópticas diferentes o propuestas de interpretación. No se limita a reproducir la naturaleza o la vida; se trata de reinterpretarla o de darle un nuevo sentido, el estético, que es lo que la convierte en arte.

--- ¿Al escribir validad usted, el mito inspirador que les atribuyen algunos a las musas?
RESPUESTA: Es una forma de llamar a esa idea volantona que entra a la cabeza proveniente del exterior (que penetra a través de los sentidos), o del interior (alimentada por un recuerdo una evocación o un sentimiento). La idea siempre va a estar por allí, pero cuando da vueltas una y otra vez, cuando se aferra a la necesidad de atraparla y volverla texto, se dice que es gracias a las musas. Ideas hay por miles, girando, generando corto-circuitos permanentes. Por eso es importante estar atento y vigilante, sensible a su necesidad de ser contada, para que no sea producto de una inspiración eventual, o una “musa inconstante” que estando allí puede no ser detectada. La clave es que cuando esté rondando, sea capturada para ser traída a un plano creativo, consciente. “Que la inspiración no me abandone, pero que cuando aparezca, me pille trabajando”, nos han repetido los maestros desde siempre. Por eso hay que tener método. Hay que anotar todos los elementos susceptibles de ser narrados, almacenarlos en un archivo, una agenda, una grabadora, en fin, traerlas a un plano real para que dejen de ser inmateriales. Tarde o temprano, téngalo por seguro, van a ser usadas. En ese sentido, si se quiere hacer obra, hay que tener inspiración(musa) pero también constancia(transpiración), acaso más importante, para atrapar la idea y de ella hacer un texto literario.

--- ¿brevemente nos podría contar como se hizo escritor?
RESPUESTA: Me pudo la necesidad de contar historias, a través de mi fascinación por escucharlas o por leerlas. Desde pequeño me encantaban los escritores y me encantaba encontrarme con las historias, a través de comic, de las colecciones de novelas condensadas de Ariel juvenil o de Colcultura, de las cientos de películas vistas en un teatro de barrio sin censura y sin método, a través de la poderosa tradición oral de un barrio y una familia de clase media que hacía culto a la palabra. En fin, el poder de contar una narración que generara interés en alguien, en este caso un contertulio o un lector. En quinto de primaria apareció un ejercicio, Mis lecturas, en el que debíamos escribir en una página un resumen, una anécdota, lo que fuera. Para mí era más que una obligación, era un goce y hacía muchas más de las 5 obligatorias de la semana. Al profesor le llamó la atención, lo hizo notar, leía en público algunas de ellas,  y algunos compañeritos me pedían el cuaderno para leer las historias y después se las contaban a otros. Ahí fue que descubrí la emoción de ser leído. Durante años escribía cuentos, poemas, canciones, resúmenes de películas, los guardaba en cuadernos, participaba en concursos, (le confieso que los perdía todos), hasta que ya adulto y profesional, empecé a darles una forma más rigurosa y a tratar de aprender el arte de escribir. Mientras tanto leía y leía y veía todo el cine que podía.

--- ¿Cómo compagina su profesión de médico, con el oficio que parece que es ya más que un hobby, este de escribir?
RESPUESTA: La medicina sigue ocupando un lugar muy importante, ya que llevo muchos años en ella y tengo un nivel de entrenamiento que solo da la práctica constante. Tengo un compromiso social con ello, ya que trabajo en un hospital del gobierno y realmente el mundo de la medicina es muy absorbente y encarretador, aunque a veces hay sinsabores y desengaños. Además, tengo una familia a la cuál sostener. Pero se compaginan porque la medicina es una puerta de entrada directa al corazón del ser humano y sus miserias, su dolor, su mezquindad, su deterioro, su desamparo. Detrás de cada paciente hay una historia, una reflexión, una posibilidad de conocerla naturaleza humana, con sus contrastes. Muchas de mis historias se alimentan de la medicina: por ejemplo, la novela EL PABELLÓN DE LA MANDRAGORA, ganadora de una beca del Municipio, considerada la primera novela hospitalaria en Colombia, o CRÓNICA DE UN PROCESO, que explora el mundo de las demandas o la que tengo en corrección,  LA CLÍNICA, que explora el mundo de la corrupción en el sistema de salud

--- ¿desde su sensibilidad humanista cree usted, que el gusto por escribir, no riñe con el rigor profesional de ser médico ginecólogo?
RESPUESTA: Nada que ver. Desde que se haga con respeto, todas las historias pueden ser contadas. Las 2 se alimentan, pues como conferencista y profesor, entreno mi necesidad de comunicarme con el receptor; mi necesidad de hacer diagnósticos correctos, me obligan a ser observador y detallista, mi necesidad de interrogar, me permite decantar información y sacarle provecho a lo importante, tratando de descartar lo que sobre o que no sea relevante. En ambos debo ser eficaz con el lenguaje para que el mensaje sea recibido y entregado de manera adecuada.

---  Desde la literatura, y si se entiende que esta puede ser un arte, como concibe el acto de la creación literaria.
RESPUESTA: Lo que te dije. Tener un tema, que proviene de una idea. Anotarla y darle un desarrollo, a través de un esqueleto que me permita tener un mapa, y ahí defino si da para cuento o para novela, por ejemplo. Si  esta estructura lo permite, agrego otras ideas previamente anotadas para reforzar la historia principal, o bosquejar las secundarias, o darle fuerza a un personaje  con rasgos de otro que lo enriquezcan y lo hagan más atractivo. Teniendo ya esta dirección, hay que escribir los capítulos, que ya se habían definido en la fase previa. Ahí se hace una catarsis, una especie de incontinencia que vierta en el texto todo lo que hay que decir de cada asunto, sin preocuparse mucho por la filigrana, pero sí por los amarres, el lenguaje, la gramática,  la ortografía, que de todas maneras tendrán su espacio de rigor en revisiones posteriores. Una lectura final de corrido a este primer borrador, ajustes aquí y allá, revisión de las muletillas, los diablillos, las repeticiones, los cabos sueltos, los lugares comunes. Después un enfriamiento de semanas o meses y luego posteriores revisiones ya sin el calor de la escritura frenética. Casi siempre hay un lector profesional, o un corrector, o una lectura en voz alta en un taller, que decanta mucho el proceso, lo depura y le quita mucho ripio que lo sobrecarga. Después ya vendrán los concursos o las publicaciones, o lo que sea, pero el proceso de creación quedó terminado.

--- ¿Considera que el escritor como tal, es o puede ser un iluminado?
RESPUESTA: Me parece que es algo presuntuoso llamarlo en esos términos. Es una persona que le pone atención a lo que otros ignoran, que está sentado pensando o escribiendo mientras otros viven otros asuntos, que está peleando con las ideas o las palabras mientras otros están de fiesta o de jolgorio. Me parece que está haciendo un proceso interno de sanación, pues mientras escribe no está dañando al prójimo, que tiene la posibilidad de desnudar sus odios y resentimientos en un proceso creativo que le permite eliminar sus demonios internos y exorcizar esos diablos vertiendo al papel cosas que de otra forma le harían daño a él o a los semejantes. Pienso que ser escritor le permite abrir caminos de pensamiento que le dan otras formas de lenguaje, de ganar conocimiento, léxico, refinamiento, expresión. Es un privilegio, más que una iluminación, pero no es gratis. Hay que tallarse, leyendo, pensando y escribiendo. No es fácil, pero con constancia funciona. Tiene poderes terapéuticos, permite una relación fascinante con un lector imaginario que muchas veces se hace real, proporciona entretenimiento propio y ajeno y abre posibilidades interesantes, de conocer gente, viajar, improvisar, saberse leído o controvertido.

… Dicen que en literatura todo ya ha sido dicho y escrito, podría opinarnos porque entonces siguen saliendo obras magistrales y exitosas.
RESPUESTA: Ya todos los temas están escritos, la diferencia es el tratamiento que se le dé a la idea. El amor, la muerte, el deseo, el odio, la venganza, la avaricia, etc, ya han sido tratadas y no hay mucho más de que hablar. Lo importante es volverlo a hacer sin repetirse, de manera novedosa, con un estilo propio que lo haga interesante y llamativo, digno de ser leído. Que llegue a nuevos públicos, que tenga una impronta, un sello.

--- ¿Brevemente nos podría opinar de los talleres de literatura?
RESPUESTA: En lo personal, fueron la respuesta a mi necesidad de narrar, pues durante la mitad de mi vida, no encontraba la manera adecuada de hacerlo, es decir, tenía la idea, hacía la narración, pero el cuento salía malo, o no se entendía, o no gustaba, o tenía defectos de forma que lo hacían inviable. El taller entrega eso, elementos de trabajo, herramientas para hacer eficaz un texto. Le cuento: con todo el material que ya tenía de manera empírica, en los primeros 6 meses de iniciado en el Taller de Mario Escobar, ya tenía una novela que quedó finalista en un concurso internacional de novela corta,(el Álvaro Cepeda Samudio de Bucaramanga), LOS CIRCULOS PERPETUOS, que ya lleva 4 ediciones y al año ya había ganado la beca de creación de 2005 con EL PABELLON DE LA MANDRAGORA, que ya lleva 2 ediciones. El taller da constancia, da rigor, hay lecturas críticas que aportan. En los comentarios y hasta en la cara de los integrantes, tanto profesor como alumnos, uno ve si el texto sirve, si es repelente o atrapa, si divierte o es un ladrillo
--- ¿Dr. Emilio, si en su quehacer literario tiene un método de trabajo, quisiera por favor compartirlo con nuestro lector del nodo de literatura “Voces, palabras y razones”?
RESPUESTA: El método no tiene nada de novedoso: estar atento, a ver qué historias hay, sabiendo que pululan por todas partes. Anotar todo lo que pueda servir ahora o después. Leer y leer. Ver muchas películas. Pensar y pensar. Escribir y escribir. Corregir. Saber que es más lo que se pierde que lo que se gana. Por ejemplo, por cada concurso ganado, hay 10 o más perdidos, y esto no debe descorazonar. No hay que ser apegado a las palabras, lo que no sirve hay que desecharlo o reescribirlo, no hay que desanimarse por las negativas de los concursos, los editores o los críticos. En una charla que dicté para una universidad, esto lo resumí en un “decálogo personal” que le comparto: http://decalogosliterarios.blogspot.com.co/2014/10/decalogo-arbitrario-para-aspirantes.html

Por último, quisiéramos darle gracias por su deferencia y su tiempo, y para escritores que empiezan a adentrarse en este maravilloso mundo, cuales podrían ser sus recomendaciones.  RESPUESTA:  La obra habla por uno. Hay que escribir, lo importante es el texto, lo demás es farándula. Si el texto es bueno, con seguridad que encuentra su camino y el resto viene por añadidura. No es un camino fácil, pero es muy enriquecedor. 

Sunday, January 28, 2018

RESEÑA DE GAMBERROS S. A., por ORLANDO RAMÍREZ CASAS -ORCASAS-



RESEÑA DE GAMBERROS S. A. , por el escritor, historiador y bloguero ORLANDO RAMÍREZ CASAS -ORCASAS-



Orlando Ramírez Casas

13:10 (Hace 2 horas.)
para Cco:
Hola, jóvenes:

El médico ginecobstetra Emilio Alberto Restrepo Baena, profesor de Facultad, y ejerciente en el Hospital Manuel Uribe Ángel de Envigado, es escritor nato, innato, por naturaleza. Mucho me temo que si el escribir y publicar libros diera plata y permitiera vivir del oficio (“los que crean eso, es mejor que se bajen de la nube. Bájense todos, menos García Márquez y Vargas Llosa, pero lo que son los demás, ¡Bájense! Ah, William Ospina, usted también se puede quedar…”), digo que mucho me temo que en ese caso el médico hubiera dejado el ejercicio de la medicina para otra vida u otra reencarnación. Claro que los que escriben libros y son profesores universitarios de literatura me van a decir que ellos sí viven de eso, pero me permito decir que ellos no viven de vender libros sino de la docencia. Es ésta la que les permite su jubilación.

Ustedes ya saben quién es él, porque frecuentemente lo menciono o reproduzco alguno de sus correos, pero en este caso voy a referirme a una deuda que tengo con él. Como a todo santo se le llega su día, a esta deuda se le llegó.

RESEÑA DE LECTURA

GAMBERROS S.A.
–Historias de pícaros, pillos, y malevos–

Por Emilio Alberto Restrepo Baena
1ª edición, Hilo de Plata Editores, 2016, 200 pp.
Programa de Planeación Local y
Presupuesto Participativo de la
Secretaría de Cultura Ciudadana
del Municipio de Medellín para la
Comuna 16 (Belén)

En la contrasolapa de la carátula se presenta al autor, y allí se relacionan los libros publicados hasta ese momento (cada año transcurrido deben sumársele uno o dos más):

“Textos para pervertir a la juventud”, “Los círculos perpetuos”, “El pabellón de la mandrágora”, “La milonga del bandido”, “Qué me queda de ti, sino el olvido”, “Crónica de un proceso”, “Después de Isabel, el infierno”, “¿Alguien ha visto el entierro de un chino?”, “Joaquín Tornado, detective”, “Un asunto miccional y otros casos de Joaquín Tornado, detective”

Como vemos, el médico pare libros a la misma velocidad que hace cesáreas o toma laparoscopias ginecológicas avanzadas. En un ya.

El índice o lista de contenido es prolífica en títulos, y cada título es una anécdota vivida o conocida por él, y contada a la manera de cuento para que los protagonistas conserven su anonimato y “cualquier parecido con la realidad sea pura coincidencia”. Allí aparecen, sin mencionar el parentesco directo, algunos primos, amigos, vecinos, profesores y compañeros de Facultad, pacientes, en fin. La gente que habitualmente se cruza por la vida de uno y que el médico va coleccionando y atesorando para sus escritos “porque la realidad suele superar a la ficción”:

Mi primer carrito
Fantasmagoría
Pétalos
Una llamada por cobrar desde el infierno
Entre palmeras, ron y cocacola
Historia de Adriana
Mea culpa
Sin palabras
Al filo de la decadencia
El primo y el timo (fragmento)
B.J.
Queridos muchachos
Intro
El empeliculado
La historia del sancocho
Un televisor full color
Un notario en nuestras garras
El perro
Monopolio
Un tiro por la culata

Detrás de esos títulos se esconde la historia del médico, profesor universitario de Facultad, de cuyas calificaciones dependía el semestre de las alumnas y la carrera de las estudiantes, que era un acosador sexual de miedo…

El primo abogado que con su labia rabulera hizo las veces de comisionista en la compraventa de una propiedad que tenía las escrituras enredadas, y en la comisión de ese delito al autor se le perdieron el capital y los intereses…

Los ladronzuelos a los que se les atravesó en el camino un televisor empacado en su caja original, con todos los fierros como se dice, y ¿Quién desperdicia un papayazo así?...

En fin, cada caso contado por el médico es de antología, con un final de antología, que no tiene desperdicio. Sin lugar a dudas, es un libro muy entretenido.

ORLANDO RAMÍREZ-CASAS (ORCASAS)

Thursday, January 18, 2018

GAMBERROS S.A. en el periódico De la Urbe

En el número 88 del periódico universitario De la Urbe, dirigido por César Alzate para los estudiantes de la Universidad de Antioquia, referenciaron a 4 cuentistas antioqueños, entre los cuales tuve el honor de encontrarme junto a Elkin restrepo, Oscar Castro y César Romero. Muy halagado,  comparto la reseña.


Tomada de: http://delaurbe.udea.edu.co/2017/12/01/de-la-urbe-88/